Para tener amigos primero hay que ser amigo


Desde que tengo uso de razón he escuchado a muchas personas decir que los amigos no existen, incluso son más los que creen en Dios, que en la amistad, lastimosamente en esta ocasión me toca contradecirlos, pues soy un fiel creyente que sí existen los amigos.

La verdad considero que en gran parte la incredulidad de muchos se debe a que no han tenido la dicha de experimentar tal aventura que solo unos cuantos hemos sido afortunados en vivir y ¡vaya que se puede presumir de esto!, como dice la hermana Glenda en su canción “quien ha encontrado un amigo ha encontrado un tesoro”.

Como un afortunado que tiene la dicha de tener amigos, puedo decirles que la amistad no se trata de cantidad, sino de calidad, y si bien es cierto se construye con el paso del tiempo, son momentos y situaciones específicas los que la hacen fuertes e incluso indestructible porque están hechas de sinceridad, amor, respeto, elementos que no se consiguen fácilmente y cuando los detectas en alguien sueles aprovecharlo, serias un tonto si lo dejas ir,  te aseguro que es como un globo: una vez lo dejas ir, jamás regresa a tus manos.

Los amigos son premios que la vida nos regala por ser leales, pero no se puede recibir dicho obsequio si andamos engañando a quienes nos rodean, pues sería como pretender obtener dólares en una alcancía donde solo depositamos centavos o esperar que un árbol crezca fuerte y sano, cuando hemos sembrado uno frágil y pequeño,  eso sería cuestión de suerte y como sé que la amistad no tiene nada que ve con la suerte, puedo decirte que de esta manera no la obtendrás. Sin duda tener un amigo es un premio para la vida que no cualquiera puede gozar, pero como siempre digo “para tener amigos primero hay que ser amigo”.

Les cuento que luego de lo que junto a los míos he vivido, me parece triste una vida sin amigos, los que tiene saben porque lo digo,  recordar esas horas de cuentos, todos los momentos buenos y malos vividos juntos, el cómplice perfecto, esa voz de tu conciencia en todo momento, ese alguien que te corrige cuando es necesario, pero que este allí para ti siempre, a pesar que no siempre estén de acuerdo, de seguro ya te hice recordar y si no tienes amigos apuesto piensas “que dicha la de aquellos”.

Para mí los amigos sí existen, pero creo que como todas las cosas buenas para que te lleguen, tienes que creerlo y estar dispuesto a arriesgarte para vivir la aventura llamada amistad, puesto que como ya dije es un premio y solo los que se atreven disfrutan del mismo.

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